Los miembros de la realeza, el príncipe William y su esposa, Kate Middleton, antes de la pandemia se habrían mudado a su residencia de Nowfolk, Anmer Hall, con sus tres hijos: el príncipe George, la princesa Charlotte y el príncipe Louis. Y durante estos últimos meses de difícil situación en Europa, apoyaron a los más vulnerables desde entregando comida a las personas de la zona hasta escribiendo cartas a distintas organizaciones benéficas. Hasta incluso, realizaron un bingo virtual para los adultos mayores como forma de entretenimiento.
Puertas adentro, también se divirtieron ya que Kate revelo que sus hijos aprendieron a cocinar, entre otras distracciones pero que completaban siempre sus tareas. Cuando se flexibilizo la situación, la familia decidió emprender unas vacaciones de verano hacia las Islas Sorlingas. Lugar que ya había visitado William cuando era niño, con su hermano el príncipe Harry, sus padres, el príncipe Carlos y la princesa Diana.
“William y Kate estaban en bicicleta, riéndose. Se veían tan felices disfrutando del clima.” Afirman fuentes de el Perfil. Ahora ya se encuentran de regreso a su residencia para continuar con sus actividades.