El congelamiento de los precios de alquileres y la suspensión de los desalojos por falta de pago fueron prorrogados por el Gobierno Nacional, junto con la imposibilidad de modificar el valor de las cuotas de los créditos hipotecarios. Esto está enmarcado en la emergencia sanitaria por la pandemia de coronavirus.
Fue el Poder Ejecutivo quien extendió hasta el 31 de enero de 2021 las mencionadas medidas, estableciendo como fecha límite febrero de 2021 para el inicio del pago de las deudas por diferencia de precio en los mismos términos y condiciones, y el 31 de enero de 2021 para las deudas por falta de pago.
Además, se extendió la mediación obligatoria por el plazo de seis meses. Esto ocurre a partir del 30 de marzo de 2021, y la suspensión establecida con anterioridad. Se oficializó que la norma alcanza a los «lanzamientos ya ordenados».
Se fijó que las deudas que pudieren generarse desde el 1 de octubre de 2020 y hasta el 31 de enero del año 2021, originadas en la falta de pago o por pagos realizados fuera de plazo o por pagos parciales, podrán ser convertidas a Unidades de Valor Adquisitivo (UVA) y refinanciadas a pagar a partir de la finalización del cronograma vigente del préstamo, en cuotas que no podrán superar la cuota original del préstamo.