Juntos por el Cambio solicitó que se volviese al sistema de sesiones, justificando su pedido en el escándalo sexual del ya expulsado legislador salteño Juan Ameri. Fue Sergio Massa, el presidente de la Cámara de Diputados quien rechazó el pedido y sostuvo que el sistema virtual «no deja de funcionar por un imbécil».
Según sus propias palabras: «El sistema no funcionaría si los diputados no pudieran hablar, no pudieran expresar sus ideas, no pudieran mandar sus proyectos: no deja de funcionar porque un imbécil hace lo que no debe en el recinto, porque lo puede hacer en su casa o arriba de su banca».
Se manifestó en la radio agregando que «el trabajo remoto acelera el funcionamiento» del cuerpo legislativo.
«La Cámara se está ahorrando mucho dinero con el sistema remoto: sólo en pasajes, en lo que va de la pandemia se ahorraron 288 millones de pesos, que se están donando al sistema sanitario argentino», explicó Massa.
A pesar de esto, dijo: «Cuando un tema por la envergadura o la necesidad de algún bloque deba discutirse de manera presencial, lo que ya está planteado para el Presupuesto y el aporte extraordinario, de acuerdo a los diputados que quieran participar de manera presencial se definirá cuál es el ámbito que reúne las mejores condiciones sanitarias para hacerlo».