Por un aumento exponencial de los contagios de COVID-19, Alemania decidió aplicar medidas extremas y desde el próximo miércoles solo permanecerán en función las actividades esenciales con cierre de comercios y colegios, así lo anuncio la canciller Ángela Merkel.
“Las medidas establecidas el 2 de noviembre no han actuado lo suficiente, estamos asistiendo nuevamente a un aumento de casos de COVID y un crecimiento exponencial de los contagios”, explicó Merkel en rueda de prensa, después de reunirse con los líderes de los Laender.
“Sabemos que el sistema de salud ya está muy estresado. Necesitamos acciones urgentes”, dijo y luego agrego: “El objetivo sigue siendo que volvamos a la posibilidad de reconstruir las cadenas de contacto” y que en siete días “se vuelva a alcanzar una incidencia de hasta 50 casos nuevos por 100.000 habitantes”.
Merkel, y los jefes de los 16 estados federados consensuaron en una teleconferencia aplicar duras medidas, que suponen un endurecimiento con respecto a las restricciones a la vida pública y la actividad comercial vigentes desde noviembre.
Las reuniones, también en Navidad, se limitarán a cinco personas de dos domicilios (sin contar los menores de 14 años). También se recomendó trabajo desde casa y se mantiene la prohibición de viajar.
Actualmente, el país europeo registró en las últimas 24 horas 20.200 nuevos contagios por COVID-19 y 321 muertes, según cifras del Instituto Robert Koch (RKI), centro epidemiológico de referencia. El récord en ambas categorías se produjo el viernes, con 29.875 nuevos casos y 598 víctimas mortales.
Y en los últimos siete días se han contabilizado 140.383 casos en Alemania, país más poblado de la UE con 83,2 millones de habitantes, con lo que la incidencia acumulada en ese período para el conjunto del país es de 169,1 casos por cada 100.000 habitantes. Desde el comienzo de la pandemia se han registrado 1.320.716 contagios y 21.787 decesos.
Alemania corre el riesgo de convertirse en “el caso de Europa”, “por eso debemos actuar”, respaldó el presidente de Bavaria, Markus Soeder. Y luego argumentó: “Esta mañana no hubo largas negociaciones sobre los detalles, porque hoy la situación es diferente. El coronavirus está fuera de control”.
La pandemia “es una catástrofe”, agregó Soeder. “Bérgamo (la zona más afectada de Italia en el primer tramo de la pandemia, NDR) está más cerca de lo que uno u otro piensa. Para evitar algo así hay que actuar con coherencia. No debemos cometer errores por conveniencia o solo por razones económicas”, continuó.
El funcionario destacó que la lección aprendida hasta ahora es que “cuanto más tarde se actúa, más dura y más severo es el daño” a la economía también. “Los niños en este período, en la medida de lo posible, deben quedarse en casa y recibir educación allí. Por eso las escuelas estarán básicamente cerradas, o en cualquier caso se levantará la obligación de asistencia”. También “se ofrecerá un servicio de asistencia de emergencia y se ofrecerá educación a distancia”, indica el borrador de las medidas que terminarán de redactar en las próximas horas del día.
Sobre el cierre de los comercios, se especifica que podrán permanecer abiertos los que ofrezcan alimentos, bebidas, farmacias, productos sanitarios, droguerías, ópticas, gasolineras, kioscos y lavanderías. El resto será obligado a cerrar, aún ante la inminencia de las fiestas de fin de año. El duro bloqueo en Alemania debería comenzar a partir del miércoles 16 de diciembre, según se prevé en el borrador de las medidas.
Debido al coronavirus, las reuniones al aire libre y la venta de fuegos artificiales para la Nochebuena quedaron prohibidas en Alemania, según se decidió hoy mismo en el encuentro que presidió Merkel con los gobernadores.