Los casos de inseguridad que se vivieron en la última semana en Tucumán generaron mucha polémica entre los ciudadanos. Al asesinato de dos policías en menos de una semana se sumó una movilización de los trabajadores de PedidosYa por la cantidad de robos que sufren en su horario de trabajo.
A causa de esta problemática, incluso, muchas personas exigieron la renuncia del ministro de Seguridad, Eugenio Agüero Gamboa, quien negó que haya razones para que dejara su cargo.
«No tengo motivos para presentar la renuncia porque estoy dando todo lo que tengo que dar. Estoy en los lugares del hecho. Acompaño a la Policía en los lugares del hecho. La ciudadanía sabe que estoy en las buenas y en las malas. Voy a seguir trabajando fuertemente hasta que lo disponga el gobernador”, dijo el ministro en respuesta a quienes piden su renuncia.
Respecto de los policías asesinados en los últimos días, indicó que no hay un «ensañamiento especial contra la Fuerza», señaló que se está trabajando en esos casos y que ya hay detenidos y líneas de investigación que se están siguiendo.
«El personal policial estaba de civil, llegaba a su casa, aparentemente tenía algún problema con algunas de estas personas que cometieron el hecho. Es una de las hipótesis que están dando vueltas”, dijo.
Además, sobre el caso de Emanuel Lazarte -el más joven de los policías asesinados-, aclaró que hace sólo un mes había ingresado y que no tenía arma. “Dentro del micro y macrocentro hay un estilo de policía que estamos buscando, que no tienen armas, y después están los que tienen mayor experiencia, como los ciclopolicías, policías de a pie, el grupo antimecheras, la Motorizada, que son los que portan armas a la mañana y a la tarde; a la noche ya tienen todos armas”, terminó.
«Contenidas» por el Gobierno
Un grupo de viudas de policías (entre las que estaban las mujeres de las últimas víctimas) se reunieron con el ministro y se mostraron agradecidas luego del encuentro.
Según explicaron, en el Gobierno serían «contenidas» a través del cobro de una pensión. A su vez, la viuda de Ramón Sánchez, asesinado la semana pasada, tendrá un trabajo; mientras que los familiares de Lazarte recibirían también una ayuda económica.
«Hace cuatro años empecé una lucha, incluso he sido detenida por decir que el Ministerio de Seguridad no nos acompañaba, pero hoy eso ha cambiado», celebró una de las mujeres tras la reunión en casa de Gobierno. «Sé que la ‘familia policial’ está de luto, estamos muy dolidos por las dos situaciones, pero hemos encontrado en el Ministerio un equipo de trabajo que está al lado de las familias», agregó.
Uno de los proyectos que se hicieron al ministro en la reunión, según dijo otra de las viudas, se trata de la posibilidad de que «cuando salgan los retiros de la policía, sean contratados para que hagan trabajos administrativos y pueda haber mas efectivos en la calle».
«Y que lo mismo pase con las viudas -siguió-. Porque generalmente se demoran dos o tres años en conseguir la pensión y no tienen plata para llevar la comida a la mesa. Entonces se planteó que sean contratadas hasta que salgan los beneficios y en ese momento dar de baja el contrato».
Tras el encuentro, a la viuda de Sánchez el Ministerio de Seguridad le ofreció un trabajo en la repartición Patronato de Liberados con el objetivo de que «salga adelante con sus hijos». «Va a tener un sueldo, con una contención y también se va a sentir una persona dignificada al saber que no va a tener que ir por cada oficina para ver qué ‘migaja’ le dan».
Al mismo tiempo, el Gobierno prometió reforzar la seguridad y conseguir una ayuda económica para la familia de Lazarte.