Una dura crítica en contra del Gobierno provincial tomó mucha fuerza en los últimos días, después de que se supiera que la provincia envió casi $12.000 millones a los municipios gobernados por peronistas, quedando exceptuados sólos aquellos que pertenecen a intendencias opositoras.
En este contexto, los intendentes que gobiernan territorio opositor fueron juntos a la Casa de Gobierno para reclamarle al gobernador por esa falta de transparencia y el «amiguismo» en su decisión de mandar fondos no reintegrables sólo a las provincias gobernadas por intendentes de su mismo color político.
Las quejas fueron transmitidas por los tres intendentes opositores, Mariano Campero (de Yerba Buena), Sebastián Salazar (de Bella Vista) y Alejandro Molinuevo (de Concepción). Además, los líderes municipales fueron acompañados por el legislador y concejal electo José María Canelada, y el diputado Roberto Sánchez.
«Esto tiene que ver con el futuro de provincia que soñamos los que estamos acá. De hecho, tanto ‘Seba’ (Salazar) como en mi caso estamos a 40 días de terminar, y no lo hacemos por nuestro interés personal, todo lo contrario. Lo hacemos porque creemos que en Tucumán hoy se están discriminando a tres municipios y nosotros como referentes tenemos que defender el futuro de los intendentes electos que van a asumir en pocos días como Molinuevo, Ana Paula (Quiles) y (Pablo) Macchiarola«, dijo Campero.
«Entendemos que con este nivel de discriminación la amenaza es constante. Y lejos de consolidar esa paz social de la que muchas veces habla el Gobierno y creo que la responsabilidad la tiene Juan Manzur, por más que a veces uno venga y esté (Osvaldo) Jaldo o Sergio Mansilla y no se sepa quién está gobernando», continuó.
Al final de la entrevista, incluso, el legislador electo y candidato a diputado por Juntos por el Cambio (JxC) amenazó con «ir a la Justicia» y dijo que de ser necesario irían a «la Justicia nacional» para reclamar por la situación.
Más tarde, el propio Campero se manifestó al respecto en redes sociales, en un mensaje que empezó con preguntas retóricas. «¿Les molesta que Yerba Buena tenga uno de los mejores centros de monitoreo policial de Tucumán? ¿Les molesta que Bella Vista tenga siete carreras universitarias? ¿Les molesta que Concepción tenga iluminación Led? ¿Qué les molesta? Porque parece que algo les molesta», escribió.
«Si no, no se entiende cuál es el criterio de distribución. En lo que va del año, la Provincia distribuyó fondos no reintegrables a municipios y comunas por casi $12.000 millones. Pero ni Yerba Buena ni Concepción ni Bella Vista recibieron un centavo. Ni uno», agregó el candidato a diputado.
Al final, cerró: «difícilmente, quieran debatir esto porque lo tenían oculto. Pero queda claro que tanto el Régimen de Coparticipación como el Pacto Social están terminados, porque posibilitan que se perjudique a los habitantes de las ciudades que no son del mismo color político».