El dictador de Venezuela, Nicolás Maduro, presentó una controvertida «ley contra el fascismo» ante la Asamblea Nacional, buscando establecer medidas para silenciar a la oposición y censurar las redes sociales. La ley, elaborada por orden de Maduro, permitiría arrestar arbitrariamente a ciudadanos bajo la premisa de «pensamiento neoliberal y conservador». Con 30 artículos, el proyecto establece duras sanciones para aquellos que se opongan al régimen, incluyendo la disolución de la sociedad civil y la prohibición de manifestaciones pacíficas. Expertos señalan que esta legislación, de ser aprobada, llevaría a Venezuela a una situación similar a la de Cuba, con una brutal persecución de disidentes políticos.