Durante el fin de semana se confirmaron los esperados despidos de los contratados en la Legislatura de Tucumán, en el marco de la disputa entre Juan Manzur y el vicegobernador Osvaldo Jaldo. Aunque los números difieren según la fuente, no son menos de mil los “prescindidos”.
Como en la provincia es un enigma la cantidad de contratos en la Legislatura porque no existe una ley que obligue a la publicidad de esa información, una fuente reconoció que el viernes se emitieron 1.085 telegramas de despido. Sin embargo, otras fuentes aseguran que son 1.600 los que se quedaron sin trabajo la semana pasada.
El Poder Legislativo tiene un presupuesto anual de 8.600 millones de pesos para el 2021. Por mes 716,6 millones de pesos. Tucumán cuenta con 49 bancas, pero en este momento sólo están ocupadas 48. Si a ese monto lo dividimos en la cantidad de legisladores, entonces a cada uno le corresponderían poco más de 14,9 millones mensuales. Si bajamos un 20 por ciento, para gastos formales, le quedarían unos 12 millones de pesos disponibles por mes a cada legislador.
Unido, el oficialismo había comenzado el período 2019-2023 con 33 de los 49 escaños de la Cámara provincial. El 8 de marzo, tras la designación del jaldista Eduardo Cobos como nuevo defensor del Pueblo, 11 de los legisladores aliados al gobernador crearon su propio armado. Pero con el correr de los días hubo nuevos «pases de bando»; así, por el momento, el jaldismo cuenta con 20 miembros, mientras que el manzurismo contabiliza 14.
Las fuentes aseguran que todos los contratos de esos 14 fueron dados de baja. Se estima que los montos que perciben los contratados oscilan entre 30 mil y 150 mil pesos mensuales.