El transporte público se encuentra habitualmente en crisis en la provincia de Tucumán, y los más afectados terminan siendo siempre los usuarios por las constantes interrupciones del mismo.
Ahora, sigue la puja entre trabajadores y empresarios, y desde UTA aseguran que el paro es inminente y podría concretarse a partir del miércoles. Es decir, si hasta el miércoles los choferes de UTA no cobran sus salarios podría haber paro.
El reclamo no es solamente el cobro de salario, sino que piden un aumento de subsidios, la suba de costos, y un mejor servicio para los usuarios.
La planilla salarial para los 3.600 trabajadores del sector, incluyendo cargas sociales, ronda los $360 millones y los empresarios sostienen que los subsidios que reciben a nivel nacional y provincial son insuficientes, que no les alcanza para pagar los salarios y que muchas líneas ya no pueden ni siquiera cubrir sus gastos esenciales.
La única buena noticia es que desde el municipio de San Miguel de Tucumán anunciaron que ante una eventual medida de fuerza, habrá combis en reemplazo de los omnibus que no funcionen.