El día de ayer el Papa Francisco pidió una “justicia restaurativa” para cuidar la Tierra, en donde remarco que hay que proteger a las comunidades indígenas de las empresas multinacionales. Luego renovó su pedido por la cancelación de la deuda a los países más frágiles del mundo, demostrando así nuevamente que no solo puede hablar de la religión, sino que tambien se involucra en la política, la economía y sobre todo la sociedad y su cultura. Este mensaje fue difundido por a través de la Jornada Mundial de Oración por el Cuidado de la Creación.
“Las comunidades indígenas deben ser protegidas de las empresas, en particular de las multinacionales, que, mediante la extracción deletérea de combustibles fósiles, minerales, madera y productos agroindustriales hacen en los países menos desarrollados lo que no pueden hacer en los países que les aportan capital”, aseguro el pontífice.
“Estamos obligados a reparar según justicia, asegurando que quienes han habitado una tierra durante generaciones puedan recuperar plenamente su uso», explico y luego Francisco expuso sobre la explotación a «las comunidades y países más pobres que buscan con desesperación el desarrollo económico”.
“No debemos olvidar la historia de explotación del Sur del planeta, que ha provocado una enorme deuda ecológica, principalmente por el saqueo de recursos y el uso excesivo del espacio medioambiental común para la eliminación de residuos” indico en referencia a que este día coincide con el Jubileo de la Tierra que se conmemora hasta el 4 de octubre.
“Es el momento de la justicia restaurativa. En este sentido, renuevo mi llamado para cancelar la deuda de los países más frágiles ante los graves impactos de la crisis sanitaria, social y económica que afrontan tras el Covid-19” convoco el Papa Francisco.
“También es necesario asegurar que los incentivos para la recuperación, que se están desarrollando e implementando a nivel global, regional y nacional, sean realmente eficaces, con políticas, legislaciones e inversiones enfocadas al bien común y con la garantía de que se logren los objetivos sociales y ambientales globales” dijo Bergoglio y continuo: “es igualmente necesario reparar la tierra. Restaurar el equilibrio climático es sumamente importante, puesto que estamos en medio de una emergencia. Se nos acaba el tiempo, como nos lo recuerdan nuestros niños y jóvenes”.
Y con respecto al último punto hablado, pidió que se haga “todo lo posible” para poder reducir el aumento de la temperatura media global por debajo de los 1,5 grados centígrados que ya se había reclamado en 2015 con el Acuerdo de Paris sobre el Clima. Pidió tambien que el mundo pueda “adoptar objetivos nacionales más ambiciosos para reducir las emisiones”.
“Nuestro estilo de vida empuja al planeta más allá de sus límites” porque “la continua demanda de crecimiento y el incesante ciclo de producción y consumo están agotando el medio ambiente”, marcando así su análisis sobre los desastres naturales que están ocurriendo en todo el mundo por su falta de protección.
“Los bosques se desvanecen, el suelo se erosiona, los campos desaparecen, los desiertos avanzan, los mares se vuelven ácidos y las tormentas se intensifican” aseguro Jorge Bergoglio, nuestro Papa argentino.