El Ministerio de Salud de la provincia de Tucumán confirmo 12 casos positivos de COVID-19 en el barrio conocido como “El Sifón” y en este caso el Gobierno redoblo los operativos para buscar más casos. En este sentido, los vecinos reclaman elementos de bioseguridad e higiene para reducir los contagios.
Una vecina del barrio, informo a un diario local que están a “siete cuadras del CAPS” y todavía no fue nadie para explicarles la situación de pandemia y “repartir los elementos de seguridad e higiene.” También comento que se difundieron muchos mensajes que alarmaron al barrio y a la población tucumana: “Estamos con miedo. En muchas cuadras del barrio no pasaron a tomar la temperatura o a repartir nada. A media cuadra de mi casa se llevaron a una persona a un centro de aislamiento y estamos preocupados porque allí funciona una verdulería y todos somos clientes.”
“Somos pobres, vivimos a la par de la vía, pero no somos animales: que nos digan qué ocurre y cómo debemos manejarnos. ¿Los changarines pueden salir a trabajar o se quedan en la casa? ¿Si nos quedamos en casa, quién nos da alimento para que coman las familias? Soy empleada doméstica, ¿voy a trabajar o me aíslo? Hay gente que no tiene para comprar pan, qué va a tener para comprar alcohol, lavandina, jabón.” Declaro la vecina de unos de los barrios más complejos que tiene la provincia.
En otro de los pasillos, comento Mercedes Zamorano, diabética y con familia que porta antecedentes de otras enfermedades, “tuvimos contacto con gente que dio positivo, queremos que vengan a decirnos que riesgo tenemos, que nos informen si debemos hisoparnos o no. Queremos que nos vengan a atender.”
Priscila Pereira, también participo de las preguntas que realizaba LA GACETA en el barrio, y compartió la preocupación de sus vecinas: “en mi cuadra no pasaron haciendo testeos de temperatura y de olfato. Primero fue un caso, después nueve, ahora son 12. Necesitamos ayuda e información para tener tranquilidad”.
El día de ayer, el gobernador Juan Manzur visito el CAPS Eva Duarte afirmando: “Estamos siguiendo la evolución natural de esta patología. Si bien el sistema atiende a todos, estamos poniendo énfasis especial a los grupos de riesgo. En esa franja social hay que poner el foco, porque tienen enfermedades de base o porque no tienen los recursos necesarios para afrontar la pandemia. Las víctimas fatales de esta pandemia son las personas con comorbilidades”.
Otra funcionaria que hablo fue Rossana Chahla, ministra de Salud, y conto que se vienen realizando operativos con personal de la salud y de seguridad. Pidió a las personas que residen en el barrio que quienes hayan estado en contacto con personas positivas de COVID se acerquen hacia el CAPS ya que allí serán asistidos y si tenían un vínculo más directo, enviados a realizarse el hisopado”.
Chahla también solicito que no deben salir “si no es necesario” ya que “el virus circula con las personas” y “acá tenemos 12 casos y queremos que no se sigan contagiando; va a depender de ustedes que podamos disminuir esta propagación del virus”. Esta es la recomendación que se hace a toda la población en todas partes, pero pueden olvidarse que las personas residentes de los barrios más vulnerables, necesitan salir para poder ganarse “el pan” del día a día ya que, en muchos casos, no poseen trabajos fijos o los medios necesarios para realizar tareas desde sus hogares.
Más tarde, el director del CAPS, Hugo Bardera, confirmo que se realizan controles “operativos de febriles con móviles”, también que se entregan “kits de cuidado” en el barrio. Concluyo diciendo que se hace “hincapié con los cuidados, la distancia social y el uso del barbijo”.