El Tedeum 2022 en la Catedral de San Miguel de Tucumán no tuvo mayores sorpresas: la ausencia del presidente Alberto Fernández, una dura crítica de la Iglesia por el crudo momento que atraviesan los argentinos, y la supuesta «reconciliación» del gobernador Osvaldo Jaldo y el intendente Germán Alfaro (si es que alguna vez estuvieron distanciados).
Sin embargo, dos candidatos que figuran con las mejores imágenes de entre los posibles gobernador y vice, se sentaron uno a la par del otro en la ceremonia: ellos son los diputados de Juntos por el Cambio Roberto Sánchez y Domingo Amaya.
Esta súbita presencia y la «casualidad» de los lugares que ocuparon durante la homilía generaron suspicacias. Pero esa no fue la única coincidencia. Los legisladores nacionales también sintonizaron en adherir a las críticas de la Iglesia por los graves problemas económicos de los argentinos.
La jornada también sirvió para el reagrupamiento y las definiciones a nivel nacional de la alianza opositora. Estuvieron presentes el Jefe de Gobierno Porteño Horacio Rodríguez Larreta y del Gobernador de Jujuy Gerardo Morales, dos presidenciables de Juntos por el Cambio.
Sin embargo, fue la súbita aparición de los dos diputados opositores lo que más impactó y lo que más comentarios generó en la convulsionada política provincial, que debe definir a los candidatos que gobernarán Tucumán desde 2023. El cortocircuito entre los radicales y Germán Alfaro, después de la victoria de 2021, es la principal causa de la posibilidad de que esta sea la fórmula más adecuada para las próximas elecciones.