La situación del BCRA fue variando desde las PASO de 2019, y el traspaso de mando de un presidente a otro. A pesar de que la posición de reservas internales no tuvo una gran variación, los economistas consideran que si se calculan las reservas netas, la caída se vio estirada. Estiman que las reservas netas están alrededor de 24% por debajo del monto había cuando asumió Alberto Fernández y un 63% abajo que antes de las PASO.
Los cálculos de la consultora Ecolatina afirman que las reservas netas son de u$s10.500 millones. Federico Moll, director de esta firma, sostuvo: “Es una situación distinta a la de 2015, porque en ese momento había un tipo de cambio oficial extremadamente alto y la única salida era un salto cambiario. En este caso no parece que fuera la salida obvia. El Central pierde reservas porque hay una brecha muy grande contra el paralelo. Habría que pensar cuál es la razón para que el paralelo esté, en términos reales, en niveles récord”.
Además, añadió: “La respuesta no está tanto en el valor del oficial -puede que haya algún ruido pero es secundario- sino en la política fiscal y monetaria que llevan adelante el BCRA y el Gobierno. Si bien no es irracional en un contexto como éste, quedan muchas dudas sobre cómo se va a desandar este camino que motivó la cuarentena”.
La caída de las reservas netas tiene sus motivos. Según algunos especialistas, el factor principal de drenaje es la venta de dólares de BCRA. Aseguran que cada vez hay mas personas comprando los u$s200 a través del home banking. En abril 1.200.000 personas compraron divisas por esta vía, en cambio en mayo fueron 2.400.000 y en junio, 3.300.000.
Otro factor a considerar, según los especialistas, es la balanza turística. Aseguran que la Argentina no es un destino turístico aprovechado, y que mucha gente de Argentina viaja al exterior o ahorra con el anhelo de hacerlo, provocando un déficit entre el flujo de dólares que entra y que sale.