Después de unos días de combate entre Azerbaiyán y Armenia donde se teme una guerra de dimensiones impredecibles, los 15 miembros del máximo órgano de decisión en la ONU aprobaron una declaración en «apoyo al llamado lanzado por el secretario general a ambos bandos para cesar inmediatamente los combates, rebajar las tensiones y retomar cuanto antes negociaciones constructivas». Además de pedir que se “cese de inmediato en los combates”.
Los países europeos en el consejo, como: Bélgica, Estonia, Alemania, Francia y Reino Unido, impulsaron en un texto la paz en aquellos territorios: «condenan firmemente el recurso a la fuerza y lamentan la pérdida de vidas humanas entre la población civil».
El consejo insistió en colaborar con el Grupo de Minsk, compuesto por EEUU, Rusia y Francia, para retomar de forma urgente un dialogo sin condiciones previas. De esta manera, el Consejo también se mostró preocupado por las «acciones militares a gran escala» en Nagorno Karabaj, pero no tomó ninguna medida concreta con respecto al conflicto a las partes involucradas: Armenia, y su aliada la República de Artsaj (no reconocida internacionalmente), y Azerbaiyán y su socio más cercano, Turquía”.
En un debato del consejo de la OCSE, en donde asistieron delegados de los 57 paises relacionados con la organización, que es liderada por EEUU, Rusia y Francia, pidieron a ambas partes el cese de las hostilidades y la reanudación de las negociaciones para encontrar una solución en medio del conflicto.
Mientras tanto, las acusaciones entre Armenia y Azerbaiyán continuaron en estos días. Por ejemplo, Armenia apunto contra su país rival, en donde aseguran que un avión fue derribado por Turquía (aliado de Azerbaiyán), y su piloto murió. Lo que fue desmentido por el gobierno turco. Una de estas, son las múltiples acusaciones entre los países que se encuentran en guerra.
Pero no son solamente acusaciones, entre los países se están ocasionando enfrentamientos que están dejando que mueran decenas de personas. En su mayoría combatientes, fallecieron en los choques en Nagorno Karabaj entre separatistas apoyados por Armenia y tropas de Azerbaiyán.
Desde que surgió la disolución de la Unión Soviética hace décadas, en el conflicto entre Armenia y Azerbaiyán murieron aproximadamente 30.000 personas.