Este fin de semana se produjo el ansiado regreso del público a las canchas. Las autoridades gubernamentales había establecido límites y protocolos que debían ser acatados por los clubes, pero algunos abusaron de la confianza estatal y no cumplieron con el 50% de aforo que solicitaban.
Ayer fue el Superclásico entre River y Boca en el estadio Antonio Vespucio Liberti, y se estima que hubo casi 20 mil hinchas de más: debía haber 36.000 pero hubo cerca de 54.000, o sea se sobrepasó la capacidad autorizada.
También trascendió que hubo 4 detenidos por falsificación de entradas y 30 actas a “trapitos” ubicados en los alrededores del estadio. El ministerio Público Fiscal de la Ciudad de Buenos Aires inició una causa por omisión de recaudo e incumplimiento del decreto presidencial (205), exceso de aforo 50 por ciento.